2-Enero-1977 (domingo)
Hoy está medio nevando. Después de comer, como me aburría, he estado haciendo limpieza de la cocina. El día ha pasado como todos, ahora Javi duerme. No escribo a casa, a ver si mañana va el teléfono, de todas formas si hace bueno bajaré el día 5. Ahora leeré un rato y después veré en la tv "La saga de los Rius". Han detenido a D.Santiago Carrillo, dirigente comunista, ahora está en libertad provisional.
6-Enero-1977 (jueves)
Ayer bajé a Sabiñánigo a comprar, terminé a la una. Fuí corriendo a Jaca, comí con ellos y me subí rápidamente porque Javi está muy enfriado, hoy está mejor, aunque le lloran los ojetes. La cocina está muy caliente pero en los cuartos hace frío. Los Reyes le han dejado a Javi un camión, una vaca de goma y un carro con un burro. A Sivia un carro como el de Javi, una muñeca, dos muñequitos y un juego de tocador. Los juguetes han sido a medias con mi madre.
28-Enero-1977 (viernes)
Hoy está nevando. Con Javi no puedo conducir porque no se está quieto. Yo creo que el próximo invierno estaremos todos juntos en Jaca. Le he empezado un chaleco a Javi, pero adelanto poco porque apenas puedo cogerlo un rato después de cenar. Ahora escribiré a casa, son las 9´30 de la noche, los tengo a los dos durmiendo y yo por fin estoy sentada. La abuela está sentada también al lado de la estufa leyendo "El Buen Amigo". Me siento triste al pensar en mis padres porque los veo envejecer muy deprisa. Voy a escribirles.
12-Febrero-1977 (sábado)
Seguimos sin tv ya hace un mes. Los niños están preciosos, a las 8´30 los llevo a la cama porque están cansados y raros, a estas horas lloran y hacen de todo, si trato de consolarlos la abuela me dice que les doy muchos vicios. Los acuesto temprano y así hay paz. Ella se pasa el día haciendo calcetín junto a la estufa y me mira de reojo cuando les hago mimos, la oigo refunfuñar con el abuelo, pero él está siempre de mi parte, cosa que me da tanto apuro que disimulo todo lo que puedo y no me meto en nada. Marcos no se entera y tampoco le digo nada porque son faterías. Ella dió a luz a Marcos cuando tenía cuarenta y dos años, hijo único (como yo) y que casi le cuesta la vida, se casó con el abuelo siendo ella diez años más mayor, fue un arreglo que resultó muy bien, ella salvó la casa porque el heredero, su hermano, murió en la guerra y su madre se trastornó. Yo comprendo que su vida ha sido muy dura y su carácter no es nada fácil, pero no es mala, es muy cerrada y ya está, es la dueña y quiere que yo lo sepa ... y a mi me importa eso ... tres pitos. Por ella no sería yo dueña ni de mis propios hijos. Marcos está en tierra de nadie y allí quiero que se mantenga. Esto es cosa mía y de nadie más. Sé defender mi terreno sin guerras. Voy a poner la lavadora ... ya me he desahogado.
6-Mayo-1977 (viernes)
Hoy es fiesta en Jaca "Primer Viernes de Mayo".
Hoy han cerrado las compuertas de la presa y han comenzado a embalsar, han dicho que en cuatro horas llegaría el agua al puente. El 31 de julio tiene que estar todo pagado y nos darán tres meses de plazo para marchar ...
12-Agosto-1977 (viernes)
Se pasan los días, las semanas, los meses y con ellos la vida. Horas de sufrimiento o alegría, quizás ninguna de las dos cosas en extremo, pero se van una detrás de otra sin que el bolígrafo que tengo en las manos llegue a alcanzarlas. Así pues, después de dar un buen salto desde mayo, sigo escribiendo hoy y ... hoy es un día fresco de tormenta. Tengo a Marcos durmiendo a mi izquierda, a Javi a mi derecha en su cuna y detrás de esa pared está Silvia a la que oigo hasta respirar. La cuna de Javi y la cama de Silvia podrían tocarse.
Angelines...tenías un diario ? es maravilloso como detallas todo, ojalá yo pudiera hacerlo así, tantas cosas que hoy se me olvidan y me encantaría recordar. Besos Martha.
ResponderEliminarSí Martha, no sé que extraña necesidad tenía de escribir cada noche. Me hizo y me hace mucho bien. Cuando escribo, mis tristezas se hacen mucho más pequeñas. No he roto nunca nada de lo que en ese momento sentía y escribí,ni lo he vuelto a leer hasta ahora, por eso me parece que esa no soy yo.
ResponderEliminarMomento triste
ResponderEliminarEsos meses fueron de confusión, de impotencia y tristeza sobre todo para Marcos y para todos los hombres que dejaron en el pueblo su medio de vida.
ResponderEliminarEn aquella época, cuando se hicieron tantos pantanos, hubo mucha gente que tuvo que abandonar las tierras donde habían vivido ellos y sus antepasados desde tiempos inmemoriales.
ResponderEliminarTodavía recuerdo la expropiación de los pueblos de Escó, Tiermas, Ruesta, etc., cuando hicieron el pantano de Yesa. Yo era una cría, pero había bastante familia de mi padre que tuvo que marcharse y sobre todo para las personas mayores, fue una tragedia.
Posiblemente son necesarios, ¿Pero no se merecería la gente que tiene que abandonar todo lo que ha sido su vida, un mayor reconocimiento? Y también una compensación económica justa, porque en casi todos los casos, lo que les daban era una miseria.
Y los eternos conflictos con las suegras, que debe haber un gen que se te activa cuando tu hijo se echa novia. Con mis amigas tenemos un pacto: la primera que dé señales de alarma, las otras le dan una colleja fuerte y con ganas, a ver si así nos libramos. ¿Cuando os avisaron de lo del pantano? ¿qué pensasteis, intentasteis pararlo o ya os pareció tarea imposible?. No me imagino lo horroroso que debe ser que te echen de tu casa de esa forma. Vosotros, que tenías ganado y tierra, ¿pudisteis conservarlo o hubo que vender?. ¡Madre, cuántas preguntas!, parezco Torquemada, pero es un tema tan interesante, y de primera mano, que no puedo evitar querer saber más.
ResponderEliminarAhora no hay conflictos porque cada una está en su casa, que eso vale mucho. Yo soy suegra y nos queremos mucho con mi nuera, tú serás una buena suegra, ya lo verás.
ResponderEliminarEl pantano fue tarea imposible, eran años de ordeno y mando. Como decía Marcos, por las buenas pudimos hacer algo, por las malas no había nada que hacer. Al ser expropiación forzosa, tuvimos que abandonar todo. Las tierras las pagaron y los animales se vendían, nosotros nos bajamos con las vacas a Jaca, estaban en una nave y las tuvimos unos años. Mas tarde entró en las oficinas de Extensión Agraria.
Cuando Marcos vendió los machos o mulos ... le costó llorar. Él lo pasó realmente mal. Bajar a Jaca con los abuelos, los hijos pequeños y sin un futuro claro ... fue muy duro para él y para todos los demás. Muchos entraron en las fábricas de Sabiñánigo. Nadie se resignó a no volver y cuando vieron la más mínima oportunidad se unieron para recuperar el pueblo.
En cuanto a lo que pagaron, se dio el caso de que algunas familias apenas les llegó para un piso !! En el pantano de Búbal, antes que nosotros, una familia no estaba de acuerdo y después de llegar hasta el Supremo, les pagaron menos aún, así que con esa experiencia poco podíamos hacer.