Al igual que el fútbol, paso bastante, pero no del todo. Me gusta que nuestro equipo haya ganado y también que Pirineo Sur esté en Lanuza. Lo que no comparto es que, ambos poderosos movimientos de masas, no vean por donde pisan, porque hay muchos colectivos cuyo trabajo bien hecho es poco valorado y sin darse cuenta los empujan a la cuneta de la indiferencia.
El otro día, unos caminantes preguntaron por "ese pueblecito abandonado donde se celebra un festival". Me entró una rabia que (en broma) les enseñé el palo.
¡¿ABANDONADO?! El pueblecito abandonado solo es la abarca donde poner el pié y que "gracias al festival existe". Pirineos Sur es algo paralelo, no hay ningún punto en común. Lanuza es el apellido y cuna del Justicia de Aragón, no una plataforma o auditorio. Abandonado no, expropiado y vuelto a recuperar, pero no "gracias a Pirineos Sur" sino a un colectivo de gente emprendedora que no quiso perder sus rices, a lo que no ayudó en nada el festival.
Pirineos Sur está aquí GRACIAS A LANUZA, no al revés, por mucho que los medios de comunicación así lo digan una y otra vez. ¿Costaría mucho decir las cosas tal como son? Por eso recibimos todo lo que rodea al festival con hostilidad porque nos arrinconan, ignoran y utilizan.
La foto es de Gema.
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