Ir por la carretera, cuando sale el sol, es un espectáculo de colores. Las montañas se difuminan entre azules. Las nieblas parecen tules de novia. En las ramas verdes cuelgan lágrimas de escarcha. Las puntas de las montañas, que ya empieza a dar el sol, se vuelven rojas, como el fuego... Lo malo, malo, es cuando ese sol te dá en la cara mientras conduces. Se acabaron los colores. No ves nada. Así le ha pasado hoy, a "nuestra conductora", para ir a Barbastro... todo el sol de cara, durante toda la carretera o autovía, según el tramo. Pero la vuelta ha sido diferente, le hemos dado la espalda y además con el maletro cargado de buenas noticias, que no pesan nada. Atravesando esas llanuras salpicadas de almendros, olivos, viñas, campos, pueblos, castillos, ríos y puentes... hemos llegado a Lanuza a la hora de comer, cuando el sol se echaba una siesta, bien arropado, entre nubes.24/9/10
SOL NACIENTE
Ir por la carretera, cuando sale el sol, es un espectáculo de colores. Las montañas se difuminan entre azules. Las nieblas parecen tules de novia. En las ramas verdes cuelgan lágrimas de escarcha. Las puntas de las montañas, que ya empieza a dar el sol, se vuelven rojas, como el fuego... Lo malo, malo, es cuando ese sol te dá en la cara mientras conduces. Se acabaron los colores. No ves nada. Así le ha pasado hoy, a "nuestra conductora", para ir a Barbastro... todo el sol de cara, durante toda la carretera o autovía, según el tramo. Pero la vuelta ha sido diferente, le hemos dado la espalda y además con el maletro cargado de buenas noticias, que no pesan nada. Atravesando esas llanuras salpicadas de almendros, olivos, viñas, campos, pueblos, castillos, ríos y puentes... hemos llegado a Lanuza a la hora de comer, cuando el sol se echaba una siesta, bien arropado, entre nubes.
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Yo soy más de atardeceres, el amanecer, no sé por qué, me da frío, pero contado así hace que me lo replantee. Miraré más de cerca, pero cuando suba un poco la temperatura, que en Asturias ya nos hemos metido, de golpe, en el otoño.
ResponderEliminarPara ir a Barbastro pasamos el puerto de Monrrepós. Desde lo alto se vé todo el Pirineo nuestro, es una vista impresionante y así, tan temprano, de verdad es precioso. Hubiera hecho una foto con todas las nieblas rodeando las montañas, pero... mejor otra vez.
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