Que buenas están recien cogidas, tiernas aún. Por aquí hay muchas, verdaderos bosques. Las mas cercanas se van cortando para leña y de las ramas rectas se hacen palos para caminar o pastorear el ganado. Pronto nos sentaremos, en el bancal de la fuente, a cascar avellanas con una piedra y comerlas después... De momento están intentando encontrar hongos de pinada, robellones, pero no tienen suerte porque este año hay muy pocos, dicen que tiene que llover.
Me has hecho retroceder más de cuarenta años por lo menos y me has situado en un prado que tenía tio Bienvenido en el que habían avellanos y un nogal y menudos banquetes que nos dábamos a "escondidas" , pues nos decían que tiernas eran indigestas, pero ¡que buenas están tiernas! y no se los años que no las he comido así.
ResponderEliminarMªJosefa, como disfrutarías aquí con las que hay. Nueces también empiezan a caer, este año hay menos pero aún tenemos del año pasado por la falseta.
ResponderEliminarYo también tengo avellanos en mi casa y es asombroso lo rápido que crecen y lo poco que exigen. Mi cosecha de este año la he repartido entre mi padre y mis perros, que las comen cuando caen al suelo. También van a buscar nueces a casa de los vecinos y me "roban" los higos del mismo árbol, en dura competencia con los pájaros. En mi casa el que no corre, vuela, y es literal.
ResponderEliminarTus perros no serán ardillas?
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