He subido por la pista que va a Sarratones y que llega hasta el Frondón, pasando por las Aleras. El sol ya estaba bajando al Peñón de la Selva, pero sus rayos llegaban con toda intensidad. Las hojas de los árboles cambian de color para caerse después, el bosque es un surtidor de colores que no se parece en nada al resto del año. Cada estación tiene sus propias características muy diferentes unas de otras, son un punto y aparte. En invierno la nieve y el pantano helado, todo blanco. En primavera flores, verde, nieve en las puntas. En verano el embalse lleno de agua y barquetas que suben y bajan. En otoño son los árboles los que tienen el protagonismo, haciendo de los bosques una explosión de colores.
Ya sé que tienes ganas de ir a Jaca, pero me pregunto qué harás allí sin estos paseos por la naturaleza. Seguro que te das tus buenas caminatas también, no se te olvide hacer fotos para los que no conocemos todo eso. Y abrigarte, claro, porque aquí ya tenemos la chimenea de continuo.
ResponderEliminarNos vamos esta semana, pero volveremos a menudo aunque sea a pasar el día. En Jaca también andamos, hay muchos caminos muy majos. Ya estoy deseando enseñártelos aunque sea en foto, si no se me declara en huelga este burro.
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