Ayer mi hija ya se preparó la mochila, después de convencer a dos amigos expertos y veteranos conocedores de estas montañas, para hacer una excursión. Todos los veranos le gusta recorrer algún lugar alto, soleado y ventilado ... como si quisiera desnudarse del gris monótono de las aulas y vestirse de cierzo, sol, horizontes, libertad ... Me ha bajado en la máquina de fotos lo que ella ha grabado antes en su retina y yo ahora, sin esfuerzo, lo vuelvo a recorrer y sobre todo a disfrutar.
¿Tu hija por casualidad no se llamará Heidi?? jajaja
ResponderEliminarmaravilloso reportaje!
saludos desde mi rincón del maestrazgomagico.blogspot.com
RAUL
Qué buenos recuerdos de este paseo... Una vez lo hice solo, otra con la familia, y ambas resultó maravilloso. Besos desde el infierno.
ResponderEliminarRaul, sólo faltaba el abuelo y las cabras. Menudo bien se lo ha pasado !!
ResponderEliminarSir, a las 8 de la mañana han salido con 5º de temperatura... !! Pero después ha quedado un día de los pocos ideales que hace por estas montañas que tú tan bien conoces.
ResponderEliminarComo se nota que la niña es una profesional de la fotografia. Preciosas. Besos a las dos
ResponderEliminarSoy de Amposta y aunque pertenecemos a la comarca del Móntsia, estamos ubicados en el Delta de L'Ebre
ResponderEliminarChelo es que si el paisaje es bonito ... todo sale bien.
ResponderEliminarMaravilla de paisaje y las fotografias ¡maravillosas!
ResponderEliminarCanela y Lavanda.
ResponderEliminarLaura, estás en la otra punta del río en un lugar precioso, después me he acordado por lo de la Peña Foradada ... !!
Que bueno que ustedes pueden disfrutar de esos paisajes, yo únicamente en fotos los gozo,¡ como los añoro.! Abrazos Martha.
ResponderEliminarla foradada es un monte de poca altura que tiene un aujero en la cúspide, es el lugar preferido de los jóvenes que van a caminar (cuesta arriba claro).Aquí tenemos la suerte de tener montes como los Montes de Caro, las playas del delta y el río y también muchos arrozales en lo llano y olivos en las montañas que aquí las llamamos llamamos "garrigas"
ResponderEliminarMartha, en este caso lo disfrutamos las dos en foto, ya no subo tan alto.
ResponderEliminarCarmen, me alegro de que te gusten.
ResponderEliminarQue barbaridad son unas fotos preciosas, me han gustado todas mucho.
ResponderEliminarQue suerte tenemos de vivir en esta hermosa provincia, cuantos lugares para perderse y tan cerquita todos, aunque cueste un poquito llegar a ellos de veras merece la pena.
Un abrazo.
¡¡QUE FOTOS MÁS BONITAS!! Hay que ver como tira la tierra, por muchas cosas que veas, lo nuestro siempre nos parece lo mejor
ResponderEliminarAnteayer en Murren en el “Restaurante giratorio Piz Gloria, a 2970m. de altura, mientras comíamos estábamos a 1 grado y nevaba como en Jaca en pleno invierno. Luego se despejó el día y las vistas de las cimas Eiger, Mönch y Jungfrau (declaradas Patrimonio de la humanidad por la UNESCO), eran espectaculares.
En una de las cabinas que tuvimos que coger para subir, el encargado era de León, al oírnos hablar en español, nos saludó y nos contó la leyenda, que existe sobre estas tres altísimas montañas.
Habitaba, en el hoy llamado “Valle de Grindelwald”, en los Alpes suizos, en el Cantón de Berna, una hermosa muchacha llamada “Jungfrau”, nombre que significa virgen o doncella.
También habitaba en lo más profundo del valle un ogro, “Eiger”, que al contrario que otros ogros era fuerte y hermoso. Un día se encontró con la doncella y se enamoró perdidamente de ella, sin conseguir que ella le correspondiera, ya que le temía por su condición de ogro.
En el mismo valle, estaba un pícaro monje: Mönch, al que Jungfrau pidió ayuda para huir del ogro que la acosaba.
Un día cuando Eiger (el ogro) estaba a punto de atraparla, el monje se interpuso entre ellos, en ese momento hubo un fuerte temblor de tierra,
el cielo se oscureció y quedaron convertidos en las tres hermosas montañas, es por eso que al estar el monje entre los dos, “Jungfrau” continúa siendo virgen para siempre
Preciosos lugares que podemos admirar gracias a las fotografias,ojala algun dia podamos recorrerlos en persona,gracias por compartirlo
ResponderEliminarDefinitivamente la naturaleza nos acerca unos a otros mucho más que ninguna otra cosa. Si dices que son fotos hechas en los Picos de Europa (quitando que la flora es propia de la zona y los más avezados, que no es mi caso, lo notarían) te digo yo que colaba perfectamente. Me gustaría poder pasar allí, por lo menos, los 3 meses de verano para poder conocer en persona todos los sitios que nos enseñas, desde Jaca a Lanuza, los monasterios, las capillas, las fiestas, los pueblos, las montañas, las rutas, las ovejas, los mercados... ¡Igual 3 meses son poco...!
ResponderEliminarNo me he dado cuenta de saludar a Laura, bienvenida, ya sabía yo que ibas a tener un montón de cosas que contar a tu vuelta. Y si queréis comprobar que lo que digo en el comentario anterior no es tan descabellado, no hay más que entrar en google y poner "imágenes de los Picos de Europa".
ResponderEliminarMUCHAS GRACIAS A CADA UNO POR VUESTROS COMENTARIOS.
ResponderEliminarLas fotos son sólo un poquitín de la inmensa vista que nos rodea cuando andamos por estas montañas, u otras, porque LA MONTAÑA es como la piel, sensible en cualquier parte del mundo, misteriosa y orgullosa ... siempre retando a su conquista. Pero las nuestras son como la casa a la que siempre volvemos, queremos y admiramos.