icue, hay unos 20 ciervos en el foso y son como de casa. Cuando nieva da gusto verlos correr. La orientación es muy buena, cada día veo unos atardeceres preciosos. Un abrazo.
¡Qué lujo, amiga!; es una suerte tener esa vista, sin duda te genera inspiración cuando escribes en tu Blog. Las cosas que observamos a través de la ventana son como un retazo de vida, por ella recibimos el contacto directo con el mundo
Tienes una ventana muy bien situada.Como me gustaría tener tan cerca a los ciervos, siento por ellos una atracción especial.
ResponderEliminarCon todo afecto y cariño
icue, hay unos 20 ciervos en el foso y son como de casa. Cuando nieva da gusto verlos correr. La orientación es muy buena, cada día veo unos atardeceres preciosos. Un abrazo.
ResponderEliminar¡Qué lujo, amiga!; es una suerte tener esa vista, sin duda te genera inspiración cuando escribes en tu Blog.
ResponderEliminarLas cosas que observamos a través de la ventana son como un retazo de vida, por ella recibimos el contacto directo con el mundo
Hay otra cosa muy buena, el sol que entra; aquí ya lo sabes tú, el invierno es muy largo.
EliminarAfiname mas con los ciervos que los quiero ver bien claritos
ResponderEliminarTe los afinaré, lo prometo, pero no desde la ventana. Bajaré a los glacis e intentaré sacarlos bien guapos, pero siempre están en las sombras.
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