No hace muchos años que la compra era algo muy restringido a aquellos artículos de primera necesidad. Todo lo que se podía criar o cultivar en la casa es lo que se consumía, si algo variaba es porque era la fiesta del pueblo. Verdura, fruta, corderos, cabritos, conejos, pollos, huevos, queso y sobre todo cerdo.
Los huertos con todo lo necesario para personas y animales. Las cuadras con los bichos destinados para la cazuela. Comprar !? ... lo justo o menos.
La abuela Orosia contaba que para Noche Buena compraba lomo fresco, como mucha distinción !!
El abuelo Melchor, como todos los hombres, estaba en la Tierra Baja con las ovejas y cuando subía para Navidad, entraba en el mercado de Zaragoza y compraba un besugo (no eran los precios de ahora), bacalao seco, guirlache e higos.Las compras importantes se hacían tres o cuatro veces al año: en la matacía, en las fiestas, en Navidades y poco más.
La ropa se arreglaba, repeazaba, remendaba, cambiaba, alargaba ... la moda era la que marcaba el sastre del pueblo y ... bien contentos pues no en todos había.
Ahora !? Ahora no somos capaces de coser ni un botón, se tira y a por otra prenda que , según dicen, resulta más barata que arreglarla y es verdad, cualquier arreglo cuesta un potosí, vamos que realmente lo del consumismo ha llegado tan suavemente que estamos metidos de lleno en una trampa muy difícil de salir, pero que muy difícil.
Eso era hasta ahora. Creo que con la crisis muchas personas vuelven a lo de antes. Feliz el que tiene un huerto para cultivar. LO peor son los que tienen que rebuscar en los cubos de basura. En este momento creo que nuestra sociedad está cambiando y valorando lo que teniamos. Creo que esta Navidad habrá muchas familias que apenas tendran para poner algo en la mesa. Un beso guapa.
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Yo creo que si, que muchas raíces volverán a reverdecer. La vida cambia y nosotros también con ella. Besicos.
EliminarTambién es verdad que nos estamos volviendo más solidarios. Mi nieta Silvia dice que hay que compartir, hay muchos niños sin comida. Y eso es porque alguien se lo inculca.
ResponderEliminarSolidaridad no solo de palabra, hace falta. A todos nos sobra algo, seguro.
Para que las familias tenga algo que poner en la mesa, compartir. Cáritas, Banco de alimentos, casos que conocemos... compartir y amar.
Un poco cada uno y puede ser una de las soluciones buenas para ayudar hasta donde se llegue !!
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