Mi paseico

Considero un privilegio haber estado sentada a la sombra del viejo e histórico olmo, testigo del antiguo Hospital de Peregrinos del Camino de Santiago, que enfermó mortalmente. Pero también es una suerte ver crecer al joven árbol, castaño de indias, que va retomando el mando de este espacio histórico y hereda el título de Árbol de la Salud. En nuestros paseos me gusta dar la vuelta a su alrededor y recordar tiempos pasados que no volverán. 

Justo al lado baja un bonito camino, cuando mis hijos eran pequeños, bajábamos a bañarnos al río Aragón e incluso a pescar. Ahora está arreglado y señalizado. Por aquí se llega al monte Grosín en el que había un castillo fortificado del que aún quedan restos, como un aljibe semi enterrado. Data del siglo IX y debió de estar ocupado hasta el XVI. Vigilaba las tierras entre Sabiñánigo, Puente la Reina, valle de Borau y del Aragón. Desde una altura de 1.423 m se divisaban los posibles invasores. 

Abundantes setas rodean los troncos.

También he recogido algunas castañas de indias para poner en los armarios como antipolillas, siguiendo el consejo de Laura M. Hoy me llevaré una bolsa y cogeré más porque el remedio es fácil, barato y natural.