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| Tenemos el mismo despertador biológico. Las golondrinas duermen encima de mi ventana, en los codos de la canalera y saben que son bien recibidas. Por la tarde estoy en el corral y cuando empiezan a revolotear en círculos es que ya es la hora de cenar y después, mientras yo tomo el fresco sentada en el viejo sofá ... les veo las colas asomando todas juntas. Me encanta que el corral siga siendo su lugar de reunión. |
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| También madruga. Viene muy temprano para tomar muestras del agua y analizarla. |
A quien madruga Dios le ayuda.... y eso es más verdad que todas las cosas.
ResponderEliminarMe encanta madrugar y salir temprano y bajar a la playa temprano, aprovechar ese fresco de la mañana que no tiene precio y si estuviera donde tú estaría todavía más encantada.
Un beso mañanero desde la otra punta.
En verano me gusta salir por la noche cada dia mas, lo que condiciona un poco el levantarte. Tantísimos años madrugando bastante me hace mas remolón, pero no se me pegan las sábanas.
ResponderEliminarPor esotos lados hoy está haciendo frío y me costó un poco salir de la tibieza de las sábanas, pero en verano es distinto.
ResponderEliminarLinda la compañía de las golondrinas. Aquí vienen en noviembre.
Besos.
Me encantan las golondrinas, pero cada vez se ven menos por aquí. Besos.
ResponderEliminarEn mi jardín revolotean un montón de pájaros a todas horas y a mi me encanta! Un abrazo querida Angelines y disfruta del verano.
ResponderEliminarhttp://www.solaanteelespejo.blogspot.com.es/
Cuando les echaba pan venían los tordos, ahora sólo veo golondrinas que no olvidan sus antiguos nidos, les gusta el corral.
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