EMIGRANTES

En España los llaman "franceses" y en Francia "españoles". Han dejado lo mejor de sus vidas en nuestro país vecino, trabajando duramente. Son emigrantes que ya no volverán a su tierra.

Recuerdo los manteles de hilo que hice a cruceta, con los sacos vacíos de azúcar que nos traían, era una tela buenísima. ¡Con que ilusión se juntaban los hermanos cuando venían de vacaciones! Eran aquellos tiempos en que, hacer comida para un grupo grande, no suponía nada extraordinario. Judietas del huerto, conejo o pollo del corral, conserva del cerdo... Todo era bueno y se compartía con verdadero cariño, es más, se guardaba lo mejor para disfrutarlo en compañía y después, el olor a café y faria era el mejor elixir... ¡Que tiempos de recuerdos! Ahora, queda una triste realidad, un muñequito hecho en la residencia donde les dan las últimas atenciones en un país... extrangero.

Foto de Miguel.