Hoy hemos comido en la Escuela. Lo han subido todo Rafael y Pepa. De primero bocaditos salados, después sopa de pescado que ha hecho Eugenio y el plato fuerte, salmorrejo, que consiste en conserva de cerdo (lomo, costilla y longaniza), torteta y tortilla de pan, todo junto unido por una salsa. Para postre pasteles... ¡Hemos salido con una tripa que parecía dos!. El guiñote de sobremesa, no puede faltar en una buena comida y las llamas del hogar, dando calor, tampoco. Bromas, risas, cuentos y recuerdos han sido el principal ingrediente de una tarde donde ha reinado la armonía.
¡Para que luego algunos digan que la vida en un pueblo es aburrida...! Os lo montais MUCHO mejor que los que estamos en ciudad y además disfrutais de esas comidas que a nosotros se nos hace la boca agua. ¡¡¡Haceis muy bien que la vida pasa deprisa y lo que no se hace se pierde!!!
ResponderEliminarPues mira, ahora mismo me voy a ver si la bajo un poco andando hasta la presa. La verdad es que ha sido un verdadero disfrute, yo no había comido nunca todas esas cosas juntas, sí por separado, pero estaba buenísima. Han dicho que así era el "recau" que les mandaban a los pastores... calorías a manta.
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