La gran ilusión e interés que tenía con el huerto no es posible explicarlo con palabras, en los últimos momentos, quiso que sus hijos apuntaran por escrito lo que él les explicaba, para que empezaran a prepararlo ... Ese trozo de tierra, si pudiera hablar, contaría los mimos que ha recibido, primero el abuelo Melchor, padre de Marcos, después nosotros mismos y ahora era Juan quien se pasaba allí todo el tiempo que le permitía su trabajo. La tierra nos ofrece sus frutos y, en el último momento ... nos abre los brazos.
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