El cielo, ese lugar indefinido que algunos dicen que está en la tierra, otros arriba en el firmamento, otros que es un estado de bienestar y felicidad ... El "ALGO" que nos gobierna, seguro que tiene un lugar para las almas, espíritus, VIDAS que se van. Nuestro entendimiento no alcanza a comprender, por eso hay tantas religiones como pensamientos. Yo siempre digo, como Pániker, que la mejor elección es seguir la religión de nuestros padres y dentro de ella buscar esa paz interior, para eso hay infinidad de senderos abiertos por hombres excepcionales, pero nada impide andar con las propias zapatillas. Cada uno llevamos una mochila a la espalda y vamos caminando hacia esa CIMA desconocida en donde nos encontraremos con todos los que han llegado ya y que nos estarán esperando. Esa es mi fe.
Acabo de entrar en el bosque y me iba directa al Rincón de Laura para decir que, un año después de un día muy triste, nos acordamos de Laurita en muchos momentos, casi cada día, que su recuerdo no vive sólo en su familia y que seguimos acompañándolos en un camino que para ellos será duro siempre. Como he visto que Trimbolera ha puesto esta entrada, lo digo aquí. Un beso Laura.
ResponderEliminarOtro para tí, Paz, hoy estoy un poco mejor, pero todavía con el ánimo un poco bajo, aunque no hay más remedio que seguir adelante, con ganas o sin ellas.
ResponderEliminarEspero poquito a poco ir recobrando mi vida cotidiana. De momento os leo en el blog os agradezco vuestro recuerdo, pero estoy como atontada y casi no sé que decir.
Sé que no me lo tenéis en cuenta y me comprendéis como lo habéis hecho siempre.
Gracias a tod@s
Trimbolera, esa es también mi fe, ellos nos esperan para cuando "ese Dios" en el que confiamos, decida que estemos juntos.
ResponderEliminarEs muy bonito todo lo que has escrito de Laurita y más sabiendo que estos momentos también son duros para ti, el recuerdo que has tenido para ella, lo he agradecido de todo corazón.
Un abrazo
Podemos creer que todo lo que la vida nos ofrecerá mañana es repetir lo que hicimos ayer y hoy. Pero, si prestamos atención, percibiremos que ningún día es igual a otro. Cada mañana trae una bendición escondida; una bendición que solo sirve para este día y que no puede guardarse o desaprovecharse. Si no usamos este milagro hoy, se perderá. Este milagro esta en los detalles de lo cotidiano; es preciso vivir cada minuto porque allí encontramos la salida de nuestras confusiones, la alegría de nuestros buenos momentos, la pista correcta para la decisión que ha de ser tomada. No podemos dejar nunca que cada día parezca igual al anterior porque todos los días son diferentes. Presta atención a todos los momentos, porque la oportunidad, el “instante mágico”, esta a nuestro alcance.
ResponderEliminarPaulo Coelho
Me ha gustado esta reflexión de Paulo Coelho y la iba a dejar en nuestro rincón, pero casi sin darme cuenta he venido al día 23.
ResponderEliminarAsí que aquí la dejo.
Me parece una buena filosofía, parece que nos dedicamos a buscar siempre lo contrario al instante feliz. Mi abuela para eso se las pintaba sola, cuando ibas a verla o la llamabas por teléfono y le preguntabas qué tal te decía "Ahora estoy bien, pero dentro de un rato igual me pongo mala". Murió con 96 años de un ataque al corazón, así que no nos la tomábamos ya muy en serio. Y el bosque está lleno de rincones de Laura, lo que me parece estupendo, una niña de su edad no se está quieta en un sólo sitio, tiene que explorar, correr y aparecer por todas partes.
ResponderEliminar¡Paz, que cosas más bonitas escribes! tu nombre no puede ser más acertado...transmites paz.....
ResponderEliminarAbrazos