Confíaba en que esa traidora enfermedad no progresara tan rápidamente.
Tú te ibas a pasear con Jesús y decidíais sobre la marcha el itinerario del día, las bromas entre los dos, siempre juntos para todo y la "hostieta" de jamón que os comíais a la vuelta. Cuando me silbabas al entrar en el corral se me llenaba el alma de alegría.
Nada es igual ya, ni parecido. Allí sigue el palo, donde tú lo dejaste.
Por las tardes, en Jaca, dábamos la vuelta por el Llano de la Victoria y te gustaba entrar en Mercadona para elegir las naranjas más gordas. Eso tampoco tiene ningún sentido ya.
Abandonada está la caña de pescar con aquellos peces que compraste por medio de un anuncio en la tele, tal y como tú los dejaste, allí siguen.
La orilla del pantano está vacía, no veo tu silueta, ni tu gorra.
Me voy a la cama y sobra mucho, mucho trozo, tampoco me esperas allí.
Dicen que es muy duro.
Yo no lo encuentro ni duro ni blando, simplemente nos hemos quedado a oscuras.
Tampoco tengo lágrimas.
Aún me parece un mal sueño !!
"La historia se repite una y otra vez."...Hace ya 14 meses que mi padre nos dejó, a mi, a mi hermana, a mis hijas y a mis sobrinas, pero sobre todo a mi madre. Ayer, precisamente, estuve con ella, hablando en la terraza de su casa, decia tus mismas palabras, amedida que la iba escuchando, recordaba tus comentarios sobre Marcos, cuando te leo, oigo a mi madre. Solo te digo una cosa, lo mismo que le digo a ella: Los, hijos, los nietos, el mundo, AÚN os necesitamos. No podeis tirar la toalla, OS NECESITAMOS, si cabe, más que antes, porque, si estais vosotras, mi padre, Marcos, estarán muy cerca. Un beso y un fuerte abrazo!
ResponderEliminarToni, agradezco mucho tus palabras que son las justas para sentir que me comprendes. Un abrazo muy fuerte para ti pero especialmente para tu madre, muy fuerte y gracias.
EliminarPreciosas palabras llenas de sentimientos, fortaleza y bellos recuerdos. Un beso. A Kafeto le encantaría pasar largos ratos junto a Bolo.
ResponderEliminarKafeto es precioso, seguro que jugarían juntos.
EliminarQué hermosas palabras y cuanto AMOR desprenden !!!
ResponderEliminarSiento tanto tu pérdida .... No puedo dejar de pensar el vacío que ha dejado Marcos en tu vida y el que dejaría en mí mi gran compañero, sólo con pensarlo me duele el corazón. En tu vida cada uno tiene su lugar y el de Marcos es insustituible.
Todo mi cariño desde Barcelona,
ANNA
Hace cuatro años que murió mi madre con 92, la pena es muy grande y siempre está dentro, pero no hay comparación, es diferente totalmente. Hemos pasado muchos años cuidando de nuestros padres y ahora se ha ido él casi sin darme cuenta.
EliminarSinceramente gracias Angelines...Me estas recordando tanto a mi Padre con lo que tu cuentas de MARCOS... Tienes razon con lo que dices que nada es igual ni parecido cuando una persona que quieres ya no esta... Solo quedan los recuerdos. Yo tambien guardo la cañica que mi Padre tenia para pasear y su gorrica...Te pongo una frase un poco triste pero real, a mi me gusta. Lo majico del momento es la compañia.. Un abrazo fuerte y sincerro desde nuestra Zaragoza.... Marivi.... Y Mucho animo.
ResponderEliminarYo siempreo digo que estoy bien y es verdad, que tengo mucha paz también es verdad, pero el dolor sigue igual y eso ya será para siempre. Gracias Mariví.
EliminarEl amor nunca muere, los recuerdos lo acrecientan, pero nada podrá llenar el espacio vacío... Son muy bellas tus palabras.
ResponderEliminarUn abrazo.
Por un lado los recuerdos me dan mucha paz y por otro el vacío me produce vértigo . Gracias Rafael.
EliminarDime
ResponderEliminarDime por favor donde no estás
en qué lugar puedo no ser tu ausencia;
dónde puedo vivir sin recordarte,
y dónde recordar, sin que me duela.
Dime por favor por qué camino,
podré yo caminar, sin ser tu huella;
dónde podré correr no por buscarte,
y dónde descanzar de mi tristeza.
Dime por favor cuál es la noche,
que no tiene el color de tu mirada;
cuál es el sol, que tiene luz tan solo,
y no la sensación de que me llamas.
Dime por favor en qué rincón,
nadie podrá ver mi tristeza;
dime cuál es el hueco de mi almohada,
que no tiene apoyada tu cabeza.
Dime por favor cuál es la noche,
en que vendrás, para velar un sueño;
que no puedo vivir, porque te extraño;
y que no puedo morir, porque te quiero.
Jorge Luis Borges
¡¡ Gracias amiga, gracias !!
Eliminar