" NADA HAY MÁS NUEVO QUE EL AMANECER DE CADA DÍA " - EMPIEZO EL BLOG EL 3 DE JUNIO DEL 2.010 - (mi refugio)

3/11/12

Ley del talión.

"Ojo por ojo y todo el mundo acabará ciego".- Mahatma Gandhi.     La frase es muy cierta y la paz, como todo, empieza por uno mismo, PERO... hay casos en que yo aplicaría la ley del talión: "Ojo por ojo, diente por diente ... " Lo siento, soy pacífica por naturaleza, pero esos crímenes hay que pagarlos y después ya les concederemos el perdón, si lo piden. Con el código de Hammurabi se detuvieron las venganzas irracionales. Es muy complicado, lo sé, y aunque diga mi opinión sigo confiando en la justicia.

9 comentarios:

  1. Yo también soy muy pacifica, pero a veces eso no es suficiente, no hay causas que se puedan perdonar, y sino que se lo digan a los que tienen a "inocentes" metidos en un hoyo. Eso no tiene perdón. Un abrazo.

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  2. La Justicia, nuestra Justicia está mediatizada por los votos.

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  3. Ángeles creo que somos pacificos hasta cierto punto...hay cosas que es imposible perdonar, y la justicia las perdona.
    Buen sábado.
    Un beso.

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  4. Hola Angeles,creo que tenemos que perdonar siempre,como nos enseño Jesús,pero eso no significa que los que han hecho un gravísimo daño, no deban pagar por ese daño irreparable que han cometido,y Dios quiera sientan verdadero arrepentimiento...

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  5. No creo que la teoría del "ojo por ojo", siempre hay que comunicar. Yours.

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  6. Lo siento, pero yo no admito el perdón en ciertos temas. Sin embargo, no comparto la venganza, tampoco. ¡Qué dificil actuar con justicia y ecuanimidad!

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  7. No soy del "ojo por ojo" pero ante ciertas situaciones me hierve la sangre y no se de lo que sería capaz.
    Un abrazo

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  8. “Esta frase, que consagra la venganza como un procedimiento jurídico, figura en dos de los 282 artículos del código sancionado por Hammurabi (1792-1750 a. C.), fundador del imperio babilónico. Lo menciona también el Antiguo Testamento al referirse a los actos de violencia. “Quien cometiere el delito, dice el texto bíblico, pagará vida por vida, ojo por ojo, diente por diente, mano por mano y pie por pie, quemadura por quemadura, herida por herida y golpe por golpe”.
    Cuando el agredido prefería que se lo compensara con dinero, tenía derecho a una suma, fijada de antemano de acuerdo con la gravedad del daño.
    El dicho en la actualidad, solo es un modo de hablar. Un desahogo para el rencor. Y prueba que la idea de devolver mal por mal es siempre tentadora. Pero ningún código moderno autoriza a desdentar o volver tuerto al ofensor”.

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  9. yO,opino como LAURA pero como somos mayores, vemos que las cosas solas se ponen en su sitio, la de cosas que hemos visto que solas se ha hecho justicia!

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