Foto obligada.

Hoy es la toma de contacto, el cambio y adaptación ...  Bolo también ha estado sentado en la ventana, observando un buen rato antes de saltar, pero al fin se ha decidido y ahora ya hace lo de siempre, viene y va a su aire haciendo vida de gato con todos los demás;  primero tiene que soportar algo que no le gusta nada, la pipeta contra pulgas y garrapatas, pero ... es el precio de la libertad !!  Nuestro primer paseo ha sido hasta la presa y hacer la foto obligada.

Hemos ido china-chana por el mismo tramo que recorrieron los ciclista de la Vuelta.

Esta llamativa teña (rrrrrrr...!!) también va tranquila, seguro que a devorar las plantas de su gusto. Es preciosa, pero me da repelús. De todas formas ni dice ni le decimos, ni me molesta ni la molestamos, sigue su camino y nosotras el nuestro.

El saltamontes, feliz mientras no lo pille un coche, hay montones muertos por la carretera, será porque les gusta el calor del asfalto, no sé ... Ya se nota la llegada de septiembre, poco a poco se pondrán los bosques de mil colores y se podrán recoger ricas moras para mermeladas, apetitosos hongos, nueces ... Yo creo que el otoño es la estación más larga porque se apropia, por un lado, de un poco del verano y por el otro tiene la valentía de robarle al invierno, aunque éste después sirve la venganza bien fría.