A mi me levanta el espíritu un café con leche y una magdalena, aquél bien caliente, aunque sea agosto en medio de una ola de calor, y ésta con sabor a pan, nada de aromas de limón ni otras finuras. Una buena ducha sin prisa y un desayuno a mi gusto ... ya encaro el día con una sonrisa y creciente satisfacción. El blog recoge mis cosetas, el paseíco cubre mis necesidades de naturaleza, vuelo y sobrevuelo para sentir caricias en el alma, ejercito el piano, juego con Miniña, siento el cariño físicamente de mis hijos ... Bolo rellena mis oscuridades ... y Marcos siempre presente como el oxígeno en el aire. Me siento en paz.
No me extraña, tienes los ingrdientes necesarios y tu buen corazón. Que poquito necesitamos, yo mi café frío aun en diciembre y el nombre es otro pero siempre presente. Un abrazo
ResponderEliminarUn abrazo Ester y bien fuerte.
ResponderEliminarCafé y magdalena.Uhmmmmmmmmm¡¡¡ y reelenas de chocolate, no?
ResponderEliminarBss
Mar, el cholate solo, ya le doy buena cuenta cuando lo tengo a mi alcance !!
EliminarHola guapísima.
ResponderEliminarYo tampoco concibo el café con leche de otra manera que no sea caliente y las magdalenas... Las de pueblo o caseras son una maravilla aunque aquí en Zaragoza, es un pelín dificil encontrarlas.
Por suerte yo tengo localizados varios establecimientos donde las hacen ellos así que me doy un lujazo como mínimo varios días a la semana )lo que me dura 1 docena, que suele ser 3- 4 días).
Tengo que perder la pereza y hacer yo misma pero las que conozco son tan ricas que no me merece la pena hacerlo.
Así que yo me apunto a un cafecico con magdalena!!!.
Besicos.
Yo también suelo hacer pero también prefiero ir a la panadería, las hacen bien buenas.
EliminarLa Paz interior es una experiencia que se logra personalmente; solamente cuando es un estado de ánimo, podemos transmitirlo a las personas de nuestro entorno.
ResponderEliminarSi pensamos en la frase de San Agustín: “No es más rico el que más tiene, sino el que menos necesita” y aprendemos a disfrutar de las pequeñas cosas de cada día, nos será más fácil alcanzarla.
Tus escritos y tus palabras transmiten paz y eso hace que yo me encuentre muy a gusto a tu lado. Gracias!
Gracias Laura, tus comentarios si que son un remanso de paz y sabiduría. Besicos.
EliminarTienes lo mejor de la vida y si además eres consciente de ello y lo sabes agradecer....no necesitas nada más. ¡Que rica esa magdalena!
ResponderEliminarUn abrazo. MªAngeles. Alicante.
MªAngeles, es verdad, no necesito más. Besicos.
EliminarMe gusta la paz y la alegría que compartes!!
ResponderEliminarUn beso.
Y a mi tu amistad que no falla nunca. Besicos.
EliminarCuanto me alegro Angelines, a mí el café también bien calentito. Besos.
ResponderEliminarAlgún día nos lo tomaremos juntas?
EliminarEso espero Angelines y que sea pronto.
EliminarHola Angelines, todo sencillo como eres tu, a mi también me gusta como a ti calentito y la magdalena que sepa a magdalena:), llevas una vida muy bonita y estas rodeada de mucho amor por todos lados y eso es porque tu lo das a raudales, por eso te sientes también y en paz:)
ResponderEliminarHas desactivado de nuevo la cuenta del face?, vamos a echar de menos tus bonitas fotos:)
Besos.
Gracias Piruja. Otra vez la he desactivado ... no sé hasta cuando porque ... no lo sé. Besicos amiga.
EliminarFelicidades, amiga, por levantar el vuelo de ese espìritu tuyo!!Un fuerte abrazo!
ResponderEliminarUn abrazo Toni.
EliminarLa chispa de la vida está en el equilibrio de las cosas sencillas, en la paz interior.
ResponderEliminarEs verdad Marcos, nada importa tanto como eso.
EliminarDa gusto leerte porque transmites esa paz en el blog cada día. Ilusión por las cosas sencillas y aprecio y reconocimiento por lo que realmente importa, el cariño de los tuyos, siempre a tu lado.
ResponderEliminarFelicidades por esa sabiduría.
Besos
Muchas gracias Jara, Besicos.
EliminarMe alegra estés así.
ResponderEliminarQué rico bien caliente.
Besos
Gracias Vero. Besetes.
EliminarMI abuela hubiera sintonizado contigo de inmediato al ver y leer esto. Aunque no en el desayuno. Para desayunar sopas de leche en puchero, sin duda. El café con leche con magdalena(s), la merienda perfecta. Con eso que nos muestras en la foto y, si en vez de una magdalena hubieran sido dos, la merienda inigualable y la paz redonda.
ResponderEliminarComo me hubiera gustado compartir esas sopas de leche con tu abuela !!!
EliminarTu blog es un remanso, y en estos tiempos de tanta agitación en el mundo da gusto entrar en él. Que Dios te siga dando esa Paz que derramas a raudales. Un beso y Feliz Diciembre.
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