Paseo de la Cantera |
Ayer noche, por cualquier punto cardinal de la ciudad saltaban los fuegos artificiales en la despedida de año y la bienvenida del nuevo. Bolo iba por los pasillos con las patas encogidas y la tripa medio arrastrando, escondiéndose y huyendo de los petardos. Por el paseo de la Cantera también quedaban las muestras de la fiesta, un lugar bien bonito para arrancar la hoja del calendario ... seguro que las ardillas tampoco entendían tanto alboroto.
¡Ay, Bolete, pobrico! Aquí se oyeron lejanos ecos de alguna petardada. A lo sumo alguno aguzo el oído y mostró una breve mirada de alerta. más no tembló ningún bigote.
ResponderEliminarAqui no se libra el pobre Bolo y lo peor es para las fiestas. Es que los tiran justo delante !!
EliminarTuve una mascota que cuando venian las Fallas, teníamos que sedarla.
ResponderEliminarPobrina, no me extraña, en Valencia será algo serio.
EliminarTe han dado la espalda los tres gatos del sidebar, se habrán asustado igual que Bolo.
ResponderEliminarLos gatos y perros le tienen mucho miedo a los petardos. Besitos.
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