DIARIO DEL ALTO ARAGÓN.

JACA.- Los presuntos responsables del asesinato de la empresaria de Sabiñánigo María Pilar Blasco podrían enfrentarse a penas de hasta de 40 años de prisión, según se extrae de la lectura del auto de procesamiento efectuada ayer por la titular del juzgado número 2 de Jaca a los detenidos, el constructor Francisco Javier Puyó y el rumano Ciprian Ioan Cetean.
La declaración indagatoria, en la que se reflejaron unos presuntos delitos de asesinato, secuestro y robo con violencia, fue escuchada por el empresario, que fue trasladado en un coche policial desde la cárcel de Zuera, en la que permanece desde junio de 2008; y por el ciudadano rumano, que está en libertad provisional y llegó junto a su abogado.
A la lectura del procesamiento, que se extendió por espacio de una hora, no asistió otro vecino rumano, Gabriel Claudio Trebea, del que existen indicios de su participación en el mortal crimen. En estos momentos, este ciudadano se encuentra fugado de la justicia y por él se expuso una orden de busca y captura internacional, en noviembre de 2008.
Al término de la declaración, el abogado Mariano Bonías, que representa a la acusación particular formada por la familia de Blasco, comentó que el proceso judicial se halla "en la recta final" y aseguró que su decisión pasará por formular un escrito en el que acusará a los responsables del crimen de los delitos de asesinato, secuestro y robo con violencia.
Al respecto, el letrado señaló que el Código Penal contempla "penas de hasta 40 años de prisión" por unos hechos que calificó como de "suma gravedad" y sobre los que hay una "profusa y abundante base probatoria para ello". En este caso, cabe resaltar que el delito de asesinato sería calificado "ya no sólo por alevosía, sino también por ensañamiento".
La investigación, según afirmó el abogado, "no hará ninguna modificación personal" de la situación de los acusados, aun cuando hay sospecha de un delito de asesinato sobre el constructor, que continúa en prisión del mes en que se produjo el suceso, y el rumano, quien por el contrario está en libertad, con la obligación de comparecer ante el juzgado.
Ricardo Grasa

Estos terribles sucesos, que ocurren demasiado frecuentemente, nos afectan mucho más cuando conocemos a las personas, entonces nos parecen increibles.